lunes, 11 de noviembre de 2013

EL CASO DE SHANTI DEVI


El caso de Shanti Devi, que acaba de producir nueva agitación en Europa, en torno al problema de la reencarnación, repercutió en el Brasil, a través de la trascripción del relato de Peter Forbes en el periódico "People", de Londres, que no es un periódico espírita. Shanti Devi es una pequeña de Delhi, en la India, que a los cuatro años de edad comenzó a revelar recuerdos de su vida anterior, declarando haber vivido en Mathura, a muchas leguas de distancia de su ciudad natal. Lo curioso es que la niña decía haberse llamado Lugdi Devi, y haber pertenecido a la casta superior de los brahmanes, a la que ahora no pertenecía más, haber estado casada y haber tenido un hijo. Reveló pleno conocimiento de los hábitos y trajes especiales de los brahmanes, sin que, jamás hubiese visto un brahmán.
Las revelaciones de Shanti eran de tal manera precisas y seguras en sus detalles, involucrando nombres de lugares y personas, que sus padres resolvieron pedirle a dos amigos que fuesen a Mathura, con el fin de develar el misterio. Los amigos fueron y constataron la plena veracidad de las revelaciones. Encontraron al viudo y el hijo de Lugdi Devi, el templo al que la pequeña se refería, el sitio en que decía haberse bañado en el río Jumna, la tienda en que hacia sus compras y todo lo demás. Cuando Shanti tenía nueve años, su "ex-marido" y su hijo de la encarnación anterior, fueron a visitarla. Al verlos, la pequeña se desmayó. Después, al volver en si, se mostró muy alegre, abrazando a ambos con efusión e identificándose ante el marido en las conversaciones que mantuvieron.
El caso de Shanti Devi envuelve particularidades curiosas, inclusive la coincidencia de sobrenombres. Los Devi de Delhi no tienen parentesco con los de Mathura, pertenciendo el mismo a una casta inferior, pues los de Mathura son brahmanes. La pequeña fue llevada a Mathura, y no sólo reconoció todos los lugares en que viviera, si no también a las personas. Visitando la casa que habitara en la vida anterior, indicó varias particularidades de la residencia y recordó hábitos que su "ex-marido" confirmó, admirado, reconociendo que "Shanti poseía la misma alma que perteneciera a su fallecida mujer", según las palabras de Peter Forbes.
Durante muchos años el caso de Shanti Devi fue comentado en la India y en el exterior, hasta que el escritor sueco Sture Lonnestrand resolvió deslindarlo. Entendía que todo no era más que un gran fraude. Fue a Delhi y a Mathura, investigó todo lo que se refería al caso, conversó con numerosas personas, examinó los sitios indicados, verificó los relatos de los investigadores anteriores, y llegó a la siguiente conclusión:. "Es este el único caso de reencarnación completamente explicado y probado, jamás verificado". Después de eso, Lonnestrand se volvió un propagandista del caso, provocando una intensa agitación en Europa, en torno del asunto. Como William Crookes, César Lombroso, Crawford y tantos otros, que habían estudiado los fenómenos espíritas con el fin de probar su falsedad, Lonnestrand se sometió a la realidad y modificó su actitud.

Escribiendo al respecto de este caso en la revista inglesa "Two Worlds", el prof. Frederico H. Wood señaló la exageración de Lonnestrand, al haber este declarado que se trataba del único caso de reencarnación completamente explicado y probado. "Como todos los recién convertidos, — dice Wood, — Lonnestrand está excitado por su descubrimiento". Y realmente es así. Porque el caso de Shanti Devi, aunque importante, y sobretodo reciente, no es el único con esas características. Hay numerosos casos de reencarnación completamente probados, y el lector curioso podrá encontrar la cita de muchos de ellos en la obra "La Reencarnación y sus pruebas", de Carlos Imbassahy y Mário Cavalcanti de Mello. El mismo prof. Wood tuvo la oportunidad de investigar, en Londres, uno de los más importantes, publicando al respecto una obra en dos volúmenes, intitulada "El Milagro Egipcio". Se trataba de la reencarnación de una princesa egipcia, del tiempo de Amenotep II, en Inglaterra. Caso probado en minucias, de manera impresionante, y especialmente a través de elementos de alta cultura, como la reconstitución de danzas sagradas y de la lengua egipcia antigua.