viernes, 24 de enero de 2014

LA MEDIUM EILEEN GARRETT


Las facultades de la médium irlandesa EILEEN GARRETT (1893-1970) fueron ampliamente investigadas
por los principales especialistas de Europa y de Estados Unidos durante varias décadas del siglo evinte. A sus excepcionales condiciones psíquicas unía su amor por la investigación científica y por ello creó en Nueva York (1951) The Parapsychology Foundation, una de las instituciones dedicadas al estudio de la paranormalidad que goza de mayor prestigio internacional.
En 1930, cuando ella vivía en Inglaterra, sucedió el famoso episodio del dirigible R101 que después se va a relacionar con uno de los más espectaculares acontecimientos en la historia de la mediumnidad. El 4 de octubre de 1930 partió de Inglaterra con destino a la India, el vuelo inaugural del gran dirigible R101 con cuarenta y ocho pasajeros a bordo. Después de haber atravesado el canal de la Mancha, fue sorprendido en horas de la mañana del día 5 por una violenta tempestad que averió sus motores y provocó su caída y explosión cerca de la ciudad francesa de Beauvais.

Tres días después, la Sra. GARRETT participaba en una sesión dirigida por HARRY PRICE (1881-1948) en el National Laboratory of Psychical Research, institución por él fundada en la capital inglesa.
En medio de la reunión, UVANI, el espíritu guía de la médium, anunció la presencia de un visitante inesperado, el difunto comandante del dirigible, capitán CARMICHAEL IRWIN, quien a través de la médium en trance describió con detalles las causas del accidente, y empleó un lenguaje tan lleno de términos especializados que sólo un experto en ingeniería aeronáutica podía comprenderlo. IRWIN parecía estar todavía muy perturbado y, entre otras cosas, habló de unos experimentos secretos que llevaba adelante el gobierno para producir un nuevo combustible formado por hidrógeno y ciertas variedades de aceites. Es importante destacar que para el momento de la sesión no se conocían aún los detalles de la tragedia. PRICE comunicó la información recibida por vía mediúmnica al Ministerio del Aire, el cual confirmó posteriormente todo lo que dijo el espíritu, tal como consta en el Informe oficial que se daría a conocer meses después.

El caso del dirigible R101 ha sido reconocido como uno de los hechos más contundentes a favor de la sobrevivencia espiritual y de la comunicación de los espíritus de las personas fallecidas. Evidentemente no es posible explicar episodios de esta naturaleza por la sugestión ni se puede suponer que la médium obtuvo la información telepáticamente, puesto que todos los que conocían lo que había ocurrido en el interior de la nave habían perecido en el accidente.